miércoles, 5 de septiembre de 2007

Crítica | QUART, EL HOMBRE DE ROMA; Entre el sacerdocio y la guardia vaticana

Habrá quien no vea con buenos ojos la historia de un sacerdote decidido a destapar los negocios oscuros que hay dentro de su propia iglesia, pero en una época en la que nuestra ficción televisiva no acostumbra a pedirnos otra cosa que nuestra presencia física frente al televisor, ‘Quart, el hombre de Roma’ se revela como una sorpresa agradable.

Roberto Enríquez y Biel Durán en 'Quart, el hombre de Roma'

Producida por Endemol en colaboración con Origen PC para Antena 3, ‘Quart’ es una serie más elaborada que la mayoría de las creaciones españolas. También nos pide más atención que el resto de esas creaciones. La trama no está hecha para aquellos que lleguen medio dormidos al sofá del salón. Es la clase de producción en la que hay que esperar para obtener respuestas, y las que se obtienen no son siempre lo satisfactorias que quisieran los consumidores de las ficciones más comerciales.

La serie se basa en los personajes de la novela ‘La piel del tambor’ (Arturo Pérez Reverte, 1995). Pocos de los que nos presentaba el primer episodio, emitido ayer a las 22:00, eran monedas de una sola cara. Tampoco había estereotipos de esos que se delatan antes de presentarse por su nombre de pila. ‘Quart’ va bastante más allá de todo eso.

El relato sigue las investigaciones de Lorenzo Quart (bien interpretado por Roberto Enríquez), un sacerdote católico al que sus superiores parecen utilizar como una especie de chico de la limpieza al que envían allí donde la suciedad amenaza con manchar el (¿buen?) nombre de la iglesia. Tanto es así que sus aventuras ya le han reportado cierta fama de agente de policía eclesiástico. Tiene viejos amigos en la policía española, pero también hay personas que no aprueban su oficio ni maneras y otras que, directamente, parecen dispuestas a pararle los pies a cualquier precio.

En el primer capítulo, Quart tenía que ocuparse del robo de una valiosa cruz en una iglesia madrileña. Sus investigaciones le conducían hasta Monseñor Aguirre (perfecto José María Pou), Legado Permanente en España. El episodio nos presentaba también a los que se intuye serán los aliados de esa especie de Jean Reno con estola que es el protagonista –el inspector Navajo (Mingo Ráfols), Macarena Bruner (una Ana Álvarez a la que le falta cierta intensidad) y Judas Tadeo (Biel Durán)–. Otros miembros del bien conjuntado reparto son Daniel Grao y Manuel de Blas.

El hecho de que muchos de los personajes sean religiosos, el que la historia juegue un papel más importante de lo habitual en el rompecabezas y el que la atmósfera sea bastante oscura y enigmática, pueden ser razones para que algunos espectadores se echen atrás. Así, los detractores de ‘Quart’ estarán divididos en dos grupos: por un lado, los que crean que ‘Quart’ es el típico producto elevado pero espeso y se nieguen a darle una oportunidad y, por otro lado, los creyentes que vean en la serie un intento de código da Vinci español creado para atacarles.

La tabla de audiencias de ayer deja entrever que los espectadores buscan algo más ligero con lo que llenar sus prime times (fue superada por la comedia de estreno ‘Hermanos y detectives’), pero para aquellos que busquen una buena ficción (sin renunciar al entretenimiento) ‘Quart’ promete acción, amores prohibidos, intrigas religiosas y una factura muy presentable.

No hay comentarios: